La Quimera es una criatura viviente híbrida. En la mitología griega era un monstruo compuesto de varios animales, mientras en nuestros días designa un ser humano con dos tipos de células genéticamente diferenciadas. La imagen de fondo son las ruinas del palacio de Saddam Hussein en Bagdad, símbolo de la era caótica y agitada vivida tanto por Occidente como por el Medio Oriente tras los ataques del 11-S al World Trade Center de Nueva York y la subsiguiente reacción de los Estados Unidos y sus aliados. Esta obra se creó además cuando numerosos signos de la derrota de la Primavera Árabe habían comenzado ya a manifestarse, con la guerra civil de Siria destacando quizás como el más desolador entre ellos. Formalmente detectamos la emergencia de una paleta con predominio de negros y grises que anuncia el desarrollo posterior experimentado por Mehretu a partir de 2014.

Chimera, 2013. Tinta y acrílico sobre lienzo, 244 x 366 cm