La fantasía de dormir en el museo motivó a Carsten Höller para concebir, en 2008, Rotating Hotel Room (habitación de hotel giratoria) e instalarla en otoño de aquel mismo año en el Guggenheim Museum de Nueva York. Elevator Bed (cama-ascensor, 2010) es una continuación de aquel concepto: se invita a los visitantes a realizar una reserva para pasar una noche en esta cama redonda, de enormes dimensiones y equipada con las comodidades de una habitación de hotel de lujo. La cama es rotatoria y se puede elevar hasta 3,5 metros por encima del suelo, lo que permite a los huéspedes contemplar el conjunto de la exposición desde este magnífico punto de observación. Durante el día la cama permanece en el suelo, como una escultura.